Hace poco publiqué un post donde informaba que Ticketmaster tenía los
boletos para algunos conciertos, entre ellos el de Shout Out Louds, al 2x1. En
esa ocasión también mencioné que no recordaba el nombre de ninguna canción del
grupo antes mencionado, pero que sí tenía la impresión de haberlos escuchados y
que según yo eran buenos.
Haciendo caso a mi consejo decidí comprar unos boletos para, acto
seguido, ir el jueves 30 de mayo al concierto de Shout Out Louds en El Plaza
Condesa. Nunca en mi vida había visto ese lugar tan vacío. Creo que estaba a un
30% de su capacidad, 40% a lo mucho. En este momento, justo antes que comenzara
el recital, lo único que podía pensar era qué sentiría el grupo al ver tan poca
asistencia. ¿Les importaría?, ¿se enojarían con la gente por no apreciar su
música e ir a verlos?, ¿estarían decepcionados con ellos mismos porque después
de 10 años de carrera no pueden convocar al suficiente público para llenar un
lugar relativamente pequeño (1,500 personas) en una ciudad definitivamente
grande (algo así como 9 millones de habitantes)?
En fin, poco después de las 9 de la noche la incógnita comenzó a
despejarse. Los cinco integrantes de esta banda sueca subieron al escenario y
comenzaron a tocar sobre un fondo azulado que parecía emular una tranquila noche
estrellada. Era una postal muy bonita, yo no podía dejar de tomar fotografías
mentales.
Desde un comienzo, Adam Olenius, el que canta, comenzó a hablar del
gusto que era estar tocando aquí y que no podía creer que se habían tardado
tanto en venir a la Ciudad de México. Una historia que francamente he escuchado
decenas de veces en voz de otros músicos y a esta altura del partido no sé si
es verdad o parte de un guión hecho hace tiempo que repiten cada que tocan en
alguna ciudad nueva. Fuese como fuese, Shout Out Louds tocó muy bien. Ellos son
una de esas bandas que suena mejor en vivo que en CD. En las grabaciones tienen
un sonido bastante agradable, suave y melódico; no es de sorprender por qué muchos
los clasifican como indie pop. Sin embargo, en vivo la cosa cambia, adquieren
mucha más fuerza, las canciones suenan con más carácter, más energía, más
ímpetu; uno realmente se cuestiona si es justo catalogarlos con esa palabra tan
sucia: ‘pop’.
De regreso al concierto. Poco a poco, no sé si fue porque así sucedió o
así lo quise creer, el lugar comenzó a verse más lleno. Yo estaba contagiado
por lo energético de la música, así que decidí acercarme más al escenario. En
un santiamén me encontraba a dos personas de la valla de seguridad. Cuando se
trata de conciertos, pocas cosas son más interesantes que estar cerca del
escenario. Me parece particularmente fascinante escudriñar los gestos faciales
y la mirada de los músicos, ¿qué es lo que miran?, ¿buscan establecer contacto
visual con la gente o se clavan en tocar?, ¿qué gestos hacen?, ¿se la están
pasando bien o simplemente están haciendo su trabajo, ganándose el pan de cada
día? En esta ocasión me pareció que la decisión fue dividida, aunque en general
fue buena. Creo que algunos, el cantante y el bajista, en especial, hicieron
buena química con la gente y poco a poco comenzaron a compenetrarse hasta llegar
a un grado de entendimiento y complicidad como el de los niños cuando conspiran
para realizan alguna travesura.
Adicionalmente, la gente estuvo bastante animada, claramente se veía
que querían pasársela bien. Y si bien casi no corearon las canciones, hacían su
mejor esfuerzo por seguir el ritmo de la música y recompensar con aplausos,
gritos y chiflidos a los integrantes del grupo. En verdad que la reacción de la
gente hacía parecer que había mucha más gente de la que en verdad se encontraba
presente.
Shout Out Louds fue una muy buena experiencia, aunque no sé si algún
día regresarán a Changotitlán. Fueron muchas las canciones buenas que tocaron,
pero me cuesta trabajo escoger a la mejor de la noche… Aunque si me torcieran
la mano probablemente iría a lo seguro y escogería “Impossible” y “Tonight I
Have To Leave It”.
Otra de las cosas que me gustaría hacer para farolear de la gran noche
que viví es poner algunos videos de las canciones que tocaron. Desafortunadamente
sólo han subido uno de ellos a YouTube y ni siquiera es una canción completa…
En fin, los dejo con la lista de canciones de esa noche así como un enlace donde podrán ver unas fotos bastante cotorras que espero sirvan de testigo y
ayuden a transmitir lo que se vivió esa noche.
1. Sugar
2. Walking in Your Footsteps
3. The Comeback
4. Impossible
5. Candle Burned Out
6. Normandie
7. Fall Hard
8. Illusions
9. Blue Ice
10. Hard Rain
11. Please Please Please
12. 14th of July
13. Very Loud
Encore:
14. You Are Dreaming
15. Walls
16. Tonight I Have To Leave It
Y para la próxima, no sean tan apretados y anímense a escuchar cosas
nuevas. Ya que luego van a estar chillando por todas las oportunidades que
dejaron pasar.
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