Café Tacvba ha sido por muchos años el objeto del afecto de muchas
personas. El concierto que dieron el pasado 5 de junio, como parte del arranque
de la gira ‘El Objeto’, estuvo muy en línea con todo el concepto que implicó la
grabación de su más reciente disco, una tocada íntima donde los afortunados
invitados se sentaron cerca, muy cerca del grupo.
Desde hace unas semanas un halo de misterio envolvía el ambiente
respecto a cómo sería la nueva gira de Café Tacvba. Se rumoraba que querían
hacer algo nuevo, pero no se tenía certeza qué. De entrada, el recinto donde se
realizaría el concierto, el Foro Corona, sonaba como un lugar extraño,
principalmente por su pequeño aforo (hasta 3,000 personas de acuerdo al sitio del local). Además, el precio de los boletos no era precisamente barato (MXP
800/USD 63+ cargos).
El tráfico y el estacionamiento no fueron inconvenientes, lo cual fue
un aliciente durante el inicio de esta travesía. Le siguió una caminata a
través de las laberínticas instalaciones donde se encuentra el Foro Corona.
Entonces ahí estaba, descansando a un costado de del Hipódromo de las Américas.
Parecía una combinación de oruga colosal y pabellón espacial. Al cruzar las
puertas giratorias que evitaban que saliera el aire de la estructura neumática,
uno se encontraba con una especie de cubo negro al centro del lugar, formado
por mantas gigantescas que no hacía nada más que quedarse ahí, descansando, sin
prestar mucha atención a los visitantes. Después de dar un breve recorrido uno
podía percatarse que esta peculiar forma geométrica tenía entradas. ¿Por qué no
averiguar qué hay detrás de la cortina? En este punto sentía como si me
encontrara mordisqueando una de esas paletas con varias capas de colores y
sabores, tratando de resolver el misterio qué hay en su núcleo. Y lo que encontré
fue un escenario cuadrado, justo al centro y cruzado de lado a lado por una
pasarela. El interior era igual de obscuro que las paredes del exterior y las
bocinas estaban colocadas en dos extremos, apuntando hacia el centro del lugar.
Sonidos ambientales (como esos que luego ponen en algunos museos de
historia natural) fueron la compañía de los asistentes durante la espera.
Encontrar lugar fue bastante sencillo, yo estaba a menos de dos metros del
escenario, aunque algunos estaban literalmente con los brazos sobre él. no
había personal ni vallas de seguridad… Una apuesta peligrosa, habrá que ver qué
pasa.
Las luces por fin se apagaron y los tacvbos desfilaron por una de las
pasarelas. Se acomodaron sobre el escenario y tomaron sus instrumentos. Todos intercambiaban
miradas al centro del lugar, lo cual, lejos de dar la impresión que se aislaban
del público, permitía que uno estableciera contacto visual con la mayoría de
los integrantes de la banda. Fue un concierto tremendamente personal e íntimo. La
cercanía hacía que el contacto ojo-a-ojo fuera real e ineludible. Uno podía ver
que teclas presionaba Meme, los pedales que pisaba Joselo, las cuerdas que Quique
rasgaba y hasta las arrugas de Zopilote… detalles que generalmente sólo son
posibles apreciar estando sobre el escenario.
A pesar de lo personal del concierto también hubo espacio para
artilugios, efectos especiales y teatralidad. Desde un árbol blanco que surgía
del centro del escenario, hasta un volcán de fuego, pasando por una lluvia de
burbujas, una inmersión en un océano de rayos laser y un enjambre de estrellas
que jugueteaban ente el público. Mención honorífica se merece la espectacular
iluminación distribuida a todo lo largo y ancho de la caja negra en la que nos
encontrábamos. La luz iba a todos lados y en todas las formas. Las paredes y el
techo también fueron parte del lienzo donde se dibujaba este mundo.
Mucho se habló en su momento de la gira 360° de U2 por su concepto y
espectacularidad. Sin embargo, a pesar de que hablamos de un público y escalas
diferentes, el concierto de Café Tacvba superó en buena medida la intensidad, capacidad
de inmersión y experiencia ofrecida versus la del grupo irlandés liderado por
Bono.
Las canciones que fueron la banda sonora de la velada fueron
relativamente tranquilas y representativas de la larga trayectoria de este
grupo oriundo de Ciudad Satélite. No está de más mencionar que la calidad
interpretativa fue de primer nivel y sólo hubo un ligero problema técnico con
el melodión en una canción del encoré.
Y ya que estamos hablando de la parte final del concierto, es
inevitable comentar algo que sucedió en este punto. Hasta este momento la gente
(según cifras oficiales éramos alrededor de 2,000) se había comportado de forma
ejemplar, no aventando objetos al escenario, ni tratando de escalarlo. Por el
contrario, se dedicaron a corear las canciones, bailar y aplaudir. Sin embargo,
durante el encoré el grupo decidió atender las peticiones de la concurrencia.
La primera elección fue “Las Flores”. Una explosión de energía surgió entre los
presentes, era como si el suelo fuera una placa de hierro ardiente y todos
estuvieran saltando para no quemar la planta de sus pies, una escena digna de
ser recordada. La siguiente complacencia fue “La Chica Banda”, aquí fue cuando
se desató el pandemónium. Decenas de mujeres (bueno, y uno que otro personaje
con una orientación sexual poco convencional) comenzaron a trepar al escenario
en algo que parecía sacado de una película de zombis. El personal para bajar a
las damas se tardó en llegar y por momentos parecía que todo podía desembocar
en un grave accidente. A final de cuentas a una changuita sí le pasó algo, no
sé exactamente qué, pero logré ver a la distancia su mano cubierta de sangre,
así como trazos de color marrón sobre la camiseta de Zopilote y Joselo. Después
de este incidente el grupo moderó el tono de las canciones restantes y la noche
terminó en relativa paz y armonía.
Café Tacvba y las chicas banda |
Aquí la lista con las canciones del concierto.
2. Pájaros
3. El Aparato
4. El Ave
5. Andamios
6. Ixtepec
(con letra de Debajo del Mar)
7. El Río
8. Árboles Frutales
9. Seguir Siendo
10. Tengo
Todo
11. 2
12. Trópico
de Cáncer
13. De Este Lado
Del Camino
14. Aviéntame
15. Esperando
16. Lento
17. Canto
Lakota
18. Zopilotes
19. Pez
20. Verde
21. Agua
22. Espuma
23. Olita Del Altamar
24. Yo Busco
25. Cierto O Falso
26. Tan Mal
27. Volcán
Encore:
28. Aprovéchate
29. Las Flores
30. La Chica Banda
31. El Espacio
32. El Baile Y El
Salón
El único detalle que sí me desagradó bastante fue la apología de las
drogas que hizo Rubén/Zopilote cuando decidió fumar algo que parecía un cigarro
de mariguana que alguien del público le dio. Las ganas de pasarla bien no son
justificación para cerrar los ojos ante el derramamiento de sangre, dolor y
afrentas que provoca este flagelo.
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