RADIOHEAD a sol y sombra: el sol

Después de la oscuridad se hizo la luz y cerca de las 21:35 Radiohead salió a la casa de cristal dispuesta en el Foro Sol (que hacía las de escenario) para interpretar un generoso repertorio que comprendía composiciones de toda su historia musical, claro, con un especial énfasis en su más reciente producción In Rainbows.

Tanto el concierto del 15 como el del 16 de marzo tuvieron cosas particularmente buenas y no quiero caer en el lugar común de decir qué concierto fue mejor, porque creo que ambos fueron un perfecto complemento que, al final, crearon una sinergia única que dejó en claro que los grandes músicos, los que grabar su nombre con letras de oro en el libro de la historia, no necesitan de ladrones perdonavidas disfrazados de mecenas para trascender. Para ser grande es indispensable hacer las cosas de corazón y si además se está en el lugar y el momento adecuado, mejor.

Cada concierto duró aproximadamente dos horas veinte minutos. El setlist de cada uno de ellos constó de 25 canciones cada uno. 13 de ellas se tocaron en los dos, mientras que las 12 restantes fueron exclusivas de cada recital ¡Casi el 50% de lo que tocaron en cada concierto fue distinto! Esto es algo que sólo se atreven a hacer los grandes. Y no me refiero a tocar algo distinto cada noche, me refiero a tocar algo distinto cada noche y hacerlo muy bien.

Ahora ¿Qué compartieron ambos conciertos? En primer lugar, canciones como “There There”, “The National Anthen”, “All I Need”, “Idioteque” y “Paranoid Android”. En segundo lugar, el público que se comportó a la altura y que demostró conocer la mayor parte de las canciones del grupo. En tercer lugar, ¡Pues que yo estuve presente en ambas ocasiones!

¿Qué fue único del primer concierto? En primer lugar estuvo la emoción de verlos por primera vez en mi vida, escuchar el primer tamborazo, el primer acorde, la primera palabra. También estuvieron los grandes sencillos como “No Surprises”, “My Iron Lung” y “Pyramid Song; así como dos de mis canciones favoritas, “Street Spirit” y “Fake Plastic Trees”, esta último cantada por casi la totalidad de los asistentes al concierto (simplemente impresionante).

El segundo concierto tuvo como invitados especiales a “Karma Police”, “Exit Music (For a Film)”, “The Bends”, “How To Disappear Completely” y “Creep”. Nunca en mi vida imaginé que iba a tener la fortuna de escuchar esta última canción. Cuando comencé a escuchar los primeros acordes mi cerebro no podía dar crédito de lo que estaba pasando. Necesité unas cuantos segundos y una zarandeada propinada por mi compinche en todos los conciertos, AE, para entender lo que estaba pasando. Una vez que acepté la situación, sentí como dos olas de energía/electricidad recorrían mi cuerpo, de la cabeza a los pies, causando un cosquilleo bastante curioso al llegar a las yemas de mis dedos. Acto seguido, mis ojos se humedecieron por la felicidad que sentía en ese momento y comencé a cantar a todo pulmón… Un consejo, estimados lectores: nunca pierdan la capacidad de asombro y sorpresa.

En fin, ambos conciertos fueron como baldes de néctar en estos tiempos turbulentos. Yo me despido repitiendo las palabras que dijo Thom Yorke antes de interpretar la última canción de la noche: “Have a nice life”.

Radiohead “Fake Plastic Trees” 15 de marzo de 2009.


Radiohead “The National Anthem”.


Radiohead “Creep” 16 de marzo 2009.