lunes, 1 de septiembre de 2014

¿Y ahora quién podrá defendernos?


¿Quién decidió que la rebeldía está pasada de moda? ¿Quién decidió que la respuesta era el conformismo y seguir el ritmo monótono de las masas? ¿Quién decidió que debíamos bajarle al volumen? ¿Quién decidió que para ser originales debíamos ser como como todos los demás? ¿Quién decidió que pensar por nosotros mismos era muy mainstream? ¿Quién decidió que llevar flores en el pelo o dejarnos el bigote nos convertía automáticamente en artistas o intelectuales? ¿Cuándo cambiamos la música que nos hace sentir vivos por la que nos dicen que debemos admirar? ¿Por qué dejamos de cuestionar lo que nos dicen los demás? ¿Qué ya olvidamos “el traje nuevo del emperador”? ¿Por qué dejamos que el miedo guie nuestra vida? ¿Cuándo fue la última vez que pusiste una canción que molestó a tus papás, a tus tíos o a tus primos fresas? ¿Cuándo fue la última vez que viste este sello en algún disco?


¿O acaso ya olvidaste que el rock, para serlo, tiene que molestar a alguien*?...

Ante un panorama tan desolador como el que vivimos actualmente sólo nos queda preguntar ¿y ahora quién podrá defendernos?

Mi gallo es Andrew WK.


Para que nos dé la fuerza y la inspiración que nos permita rockear y patear traseros con canciones como esta:


O esta:



*Aburrir hasta la muerte con  melodías insulsas o ritmos repetitivos e interminable no califica como molestar.

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