Esto de los volcanes se ha puestos muy de moda últimamente.
No, no me refiero a ese tipo de volcán.
Sí, justamente ese es el volcán del que estoy hablando.
El Popocatépetl, para los que no lo sepan, se encuentra en México, entre
los límites del Estado de México, Morelos y Puebla. Si usted, querido lector de
este su blog de confianza, no está familiarizado con la capital de la República
Mexicana, quizá le interese saber que esta estructura geológica se alcanza a
ver a simple vista, siempre que las condiciones climatológicas lo permitan,
desde la Ciudad de México. En los últimos meses la actividad de esta montaña
humeante se ha incrementado e incluso, la semana pasada, parte de la Ciudad
amaneció cubierta de una fina capa de ceniza volcánica cortesía de Don Goyo.
Sólo basta escribir Popocatépetl en algún buscador para ver todas las noticias
que se publican diariamente donde se describe (y se trata de adivinar) el
estado de ánimo de este guerrero.
La cuestión es que mi cerebro, el cual suele hacer algunas conexiones
poco usuales, al ver aceras y autos espolvoreados con esta capa de partículas
de roca y mineral, inmediatamente buscó en el disco duro y regresó la siguiente
canción.
Presidents of the
United States of America “Volcano”
Y por si lo estaban preguntando, los PUSA siguen en activo; pero ya
hablaremos de ellos en otra ocasión.
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