Dicen que
las matemáticas sirven para entender todo el universo. A través de números y
fórmulas podemos entender lo que fue, es y va a ser con bastante confianza. Hay
una fórmula que resulta particularmente cierta, particularmente en lo que a
música se refiere:
‘Artistas’ +
entrevistas = cliché
¿Cuántas
veces no han escuchado decir a un ‘artista’ que el disco que acaba de lanzar al
mercado es el mejor que ha hecho en toda su carrera?
¿Cuántas
veces no han escuchado a un ‘artista’ decir que el público del país en el que
está tocando es el mejor del mundo?
¿Cuántas
veces no han escuchado a un ‘artista’ alardear sobre la diversidad de ritmos
incluidos en su disco y cómo tiene “un poco para todos”?
Recientemente
la banda escocesa Belle and Sebastian sacó una recopilación de lados b llamada
‘The Third Eye Centre’. La cual reúne varias canciones de sus años en Rough
Trade.
Y no tomen a
mal mi introducción, mi intención no es echarle tierra a este disco, muy por el
contrario, quiero hacer notar como ellos, bajita la mano ruido y sin muchas
ganas de alardear, lograron un producto de primera. Lo primero que llama la
atención de esta recopilación, y lo hace de forma muy grata, es la calidad de
las canciones. Es difícil imaginar cual pudo haber sido la razón que hizo que
fueran orilladas a un segundo plano, a un lado b. Sin embargo, esta no es la
primera vez en la historia que algo parecido sucede. Cuando Oasis recién salió
a la luz pública allá en la década de los noventa, los lados b que acompañaban
a sus sencillos eran una delicia, por mucho tiempo me pregunté por qué no los
incluían en una recopilación, hasta que por fin salió ‘The Masterplan’.
¿Y de que
van las canciones incluidas en ‘The Third Eye Centre’? Bueno, escuchar el disco
es como ser invitado en una conferencia de las Naciones Unidas o como estar conversando
con una persona con un serio trastorno de personalidad múltiple. ¿Por qué? El
grupo es el mismo, pero cada canción tiene su propia personalidad y estilo; algunas
son alegres, otras apacibles; algunas hablan con un fuerte acento, mientras otras
lo hacen con elegancia; algunas sólo quieren echar relajo, otras son más de la
onda intelectual... En fin, ninguna se parece a la otra (aunque en el fondo
siguen siendo el mismo chango).
Creo que
parte del chiste de escuchar ‘The Third Eye Centre’ es ir descubriendo el
rostro y personalidad cada canción e irse sorprendiendo en el camino. Sin
embargo, también quiero hablar, aunque sea un poco, de algunos de los 19
personajes del disco. Por lo tanto, creo que es momento de decir SPOILER ALERT,
los que quieran seguir leyendo, que lo hagan bajo su propio riesgo, so pena que
se pierda el factor sorpresa.
“I’m a
Cookoo” – Remix con tintes de cover a cargo de the Avalanches, con sabor
africano.
“Suicide
Girl” – Curiosamente lo que hace distinta a esta canción del resto es que es
‘normal’ (o lo que quiera decir esa palabra). Movida, alegre y sabrosita.
“Love On The March” – Belle and
Sebastian coqueteando con el bossa nova. De seguro a SL le va a gustar
esta canción.
“Your
Cover’s Blown (Miaoux Miaoux Mix)” – En general las remezclas me parecen una
tomada de pelo. Las canciones tienden a ser echadas a perder por la necedad de
meter elementos de basura electrónica. En este caso se respetaron los elementos
básicos y el resultado no quedó tan mal. Texturas disco amenizadas con un
cencerro muy coqueto ¡Yeah!
“The Eighth
Station of the Cross Kebab House” – Esta canción es lo que pasaría si Danny Elfman
decidiera hacer una canción ska.
“Stop, Look
And Listen” – Llámenme loco, pero parece que esta canción la hizo un joven Bob
Dylan.
“Passion Fruit” – ¡Belle and
Sebastian a la surf!
“Mr. Richard” – ¡Belle and Sebastian
a lo latino!
“Meat and
Potatoes” – Una canción de amor… sadomasoquista (sí, de los que usan trajes de
latex, esposas y látigos)… Por extraño que suene, les recomiendo mucho esta
canción.
“The Life
Pursuit” – Intro al estilo chiptune y una métrica bastante peculiar hacen de
esta canción punto y aparte.
Belle and Sebastian “Your Cover’s
Blown (Miaoux Miaoux Mix)”