sábado, 16 de agosto de 2008

Someone Great


Muchas veces uno escucha decir a otros que la vida no es justa. Estas mismas personas tratan de de ejemplificar esta afirmación de mil formas. Mencionar cada una de ellas llevaría mucho tiempo, sin embargo, creo que las más frecuentes tienen que ver con la corrupción de los políticos y los americanistas.

Para mi el mejor ejemplo que la vida no siempre es justa es el caso de los islandeses de Sigur Rós, porque si la vida fuera justa ellos serían uno de los grupos más conocidos y admirados del mundo. Su música es inspiradora y nos transporta por lugares lejanos gracias a su combinación/evolución de sonidos suaves y enérgicos. Sus canciones tienen una fuerza arrolladora que nos ayuda a descubrir emociones que no sabíamos que existían. Escucharlos es como nacer otra vez y asombrarnos de todo lo que nos rodea. Simplemente te sientes feliz de estar en ese lugar, escuchando esa música, viviendo ese momento.

El siguiente video corresponde a la canción Hoppípolla y está dedicado a mi abuelo. Porque siempre que estaba con él sentía la misma felicidad que al escuchar a Sigur Rós y porque siempre que los escucho a ellos me acuerdo de él.



www.sigurros.com

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